El bosque pintado de Oma
El Bosque pintado de Oma (Baso Margotua en Euskera) es uno de los lugares más curiosos de todo el País Vasco. En ese pequeño rincón, la naturaleza y el arte se fusionan, dando lugar a 4 hectáreas llenas de 47 obras pintadas en los árboles a todo color.
💡 NOTA: Actualmente el Bosque de Oma está cerrado por una enfermedad que está matando los árboles. Se está buscando una nueva localización en Urdaibai. |
¿Qué encontrarás en este post?
Qué es el Bosque de Oma
El bosque de Oma está situado en la reserva de la biosfera de Urdaibai, muy cerca de Guernica y consiste en un conjunto de árboles que han sido pintados de manera que se pueden apreciar un total de 47 figuras determinadas desde una perspectiva específica. Fue pintado por el artista Agustín Ibarrola entre los años 1982 y 1985. Las obras están pintadas de manera que para verlas tenemos que situarnos en un punto en concreto.
La entrada es completamente libre y gratuita.
Cómo llegar al Bosque de Oma
El Bosque de Oma está situado en el Valle de Oma (Kortezubi) en la Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
🚗 Coche
La manera más cómoda de llegar hasta el Bosque de Oma es en coche privado. Lo podéis aparcar al lado del restaurante Lezika, donde hay varias plazas para coches y algunas mesas para hacer pic nic.
🚊 Transporte público
Es posible, aunque algo engorroso, pues hay que andar más hasta el lugar de inicio de la ruta.
- Tren: Con la empresa ferroviaria Euskotren podemos llegar hasta Gernika y desde allí andar unos 7km.
- Autobús: Con Bizkaibus podemos ir hasta kortezubi y desde aquí andar unos 3km hasta el incio de la ruta.
🛌 Alojamiento en el País Vasco |
Durante nuestra ruta por el País Vasco nos alojamos en 3 hoteles reservados a través de Booking: ✅ Pensión Peñaflorida: Pensión en San Sebastián. Muy buena localización, en pleno centro. ✅ Pensión Bilborooms: Localización perfecta en el centro de Bilbao e incluye desayuno. ✅Apartamentos Mundaka: Ideal para hacer excursiones como visitar Oma, Guernica o Gaztelugatxe. |
Ruta por el Bosque de Oma
La excursión por el bosque de Oma es un recorrido circular en el que se parte del restaurante y se llega al mismo por otro lugar. El recorrido total a caminar son unos 7,4km, aproximadamente 3 km para llegar hasta la zona pintada y el resto para volver. La excursión no tiene mucho desnivel y es fácil de hacer.
Os recomendamos que antes de ir, pidáis en información un pequeño mapa en el que hay una lista de todas las figuras que hay con su título. Esto os ayudará a entender qué representa cada una de ellas. También lo podéis encontrar en este enlace.
Nuestra experiencia en el Bosque de Oma
Una vez aparcamos el coche en el restaurante bien temprano, empezamos a caminar adentrándonos en el parque natural, rodeados de naturaleza pura y de colores rojizos típicos en esta época del año.
Después de caminar (la mayor parte del tiempo en subida) durante unos 3km (1 hora aproximadamente) llegamos a una intersección que por fin nos dice que estamos llegando. ¡Nos quedan solo 250 metros hasta él!
Así que bajamos por unas escaleras y al final vemos la primera de las figuras: Invitación al beso, en la que vemos que si nos ponemos en la perspectiva correcta (que está marcada en el suelo con una flecha indicando hacia dónde hay que mirar), vemos aparecer la figura de unos perfectos labios.
Y no muy lejos de allí nos encontramos lo que yo llamé el corazón del bosque, el centro del bosque pintado y donde se encuentran las dos figuras que más me gustaron. Una de ellas, probablemente la más conocida y la más fotografiada, es El arco iris de Naiel, una figura que el artista dedicó a su nieta Naiel y en la que se refleja perfectamente el ideal del bosque; esa mezcla entre naturaleza, arte y, sobretodo, color.
Si nos adentramos un poco más en el bosque podemos encontrar otra zona que me encantó, la que está formada por un montón de ojos. En esta parte podemos encontrar varias figuras que se pueden apreciar desde diferentes puntos de vista. Entre ellas veréis El ojo grande, Miran igual que tú, Ojos de pasado y del presente y La vida tiene más ojos que yo aunque me cambie de sitio y multiplique mi visión (¡vaya título!). Dicen que una imagen vale más que mil palabras, así que nos dejamos algunas de las fotos que hicimos.
A partir de aquí el recorrido se vuelve más lineal por un camino marcado. Nosotros nos dedicamos a mirar una a una todas las figuras e intentar entender su significado (ya que a veces no es fácil). Os dejamos algunas de ellas, aunque creo que ninguna fotografía hace justicia a lo que es ese lugar en realidad.
Después de pasarnos un buen rato en el bosque, llegó la hora de volver al coche para poner rumbo a casa. El camino de vuelta se nos hizo un poco más pesado que el de ida, aunque nos sorprendió que el paisaje era totalmente diferente. Si bien al ir habíamos recorrido bosque, la vuelta se hace por un camino por el valle, por lo que nos encontramos rodeados de montañas y algunas granjas.
Una vez llegamos de nuevo al restaurante, comimos unos bocadillos que habíamos preparado en una de las mesas de pic-nic y en cuanto acabamos pusimos de nuevo rumbo a Barcelona.